Esta es la imagen de Códice Mendoza donde se representa el glifo de México en el centro del Anahuac

Esta es la imagen de Códice Mendoza donde se representa el glifo de México en el centro del Anahuac
El águila está sustentada en el nopal. La tuna, fruto del nopal, representa el corazón humano, y por lo tanto es una representación de la creencia azteca del sacrificio humano y ofrenda del corazón para garantizar el don de un nuevo día.

28 de marzo de 2008

Malinchismo de Estado

Observatorio Ciudadano "Mirilla Cultural", 27 Marzo 08, J. Gabriel Salazar Martínez. Dos Caciques, dos Títeres entorno a la Cultura. Tristemente suele ser costumbre tan sólo unos cuantos intelectuales y artístas mexicanos no acotados por el presupuesto hemos podido observar amenazados e impotentes el cinismo con que los déspotas gobernantes y sus funcionarios a modo bien aceitados han sabido utilizar viejas artimañas de persuasión mediante el intercambio de baratijas deslumbrantes por auténticas joyas culturales con la finalidad de engañar y someter a las mayorías marginadas en la miseria y a multitudes de ignorantes deslumbrados por el consumismo a través de la labia institucional carente de hechos y de políticas públicas democráticas con beneficios sustanciales equilibrados tan necesarios para el crecimiento sustentable de una nación pluricultural y multiétnica como la nuestra. El Poder Ejecutivo representado por Felipe Calderón Hinojosa y su encargado del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes nos dan muestra clara de la ausencia de una Política de Estado democrática responsable e incluyente en cuanto a diversidad cultural se refiere, deteriorando mediante una limitada visión malinchista colonial y políticas públicas sustentadas tan sólo en modelos exteriores omitiendo nuestros pueblos originarios e insistiendo en imponer una visión occidental de las bellas artes haciendo de los museos y de las escuelas un objeto exclusivo de adoración en contra-posición a las culturas populares e indígenas que sólo deben ser vistas como el folklor que habrá de ser tratado exclusivamente como generador de productos de exportación y de atractivo turístico, y no como elementos auténticos y configuraciones profundas de identidad y de significación para nuestros pueblos y comunidades nacionales. Así lo podemos constatar y lamentablemente comprobar cuando observamos que muy lejos de la justicia sin embargo sí basados en la legalidad, han separado al promotor cultural Gerardo Pérez Muñoz de su cargo como responsable del la Unidad Puebla de Culturas Populares e Indígenas organismo dependiente del CONACULTA, aduciendo su incumplimiento de metas durante el ejercicio 2007 así como su inconclusa certificación como servidor público. Sobre lo anterior habría que preguntarse lo primero ¿Qué proyectos y objetivos concretos y relevantes pueden llevar a cabo los Consejos de Culturas Populares e Indígenas en cada entidad federativa con 290 mil pesos anuales? también sería pertinente preguntarse ¿ si acaso será marginación y exclusión del gobierno federal en sus políticas del públicas que las oficinas dedicadas a las Culturas Populares e Indígenas en la república cuenten con asignaciones financieras que significan el 0.01% de los 2 mil 488.5 millones de pesos que ejercen en la Cultura?, señores líderes y representantes del pueblo de México ¿no será que ustedes son los que carecen, además de la famosa certificación de funcionarios públicos, del sentido común, y la noción de la justicia? Miremos si no sucede lo mismo con el Gobernador de Puebla Mario Marín Torres y su encargado de la Secretaría de Cultura Alejandro Montiel Bonilla cuando vemos que, de los 100 millones de pesos asignados para la dependencia, el 70% se utiliza en gasto corriente que incluye por supuesto el sueldo de más de 600 empleados entre ellos el secretario, el subsecretario, 14 directores de área, 16 subdirectores y 33 jefes de área, por supuesto todos ellos damos por hecho certificados como funcionarios públicos. Entonces nos preguntamos ¿cómo es posible que proyectos como el del Centro Cívico 5 de Mayo, el museo José Luís Bello y González, la biblioteca especializada del maestro Fernando Tola de Habich, y la Orquesta Sinfónica del Estado, por mencionar algunos, con evidentes muestras de incompetencia, de negligencia, y de irresponsabilidad, en el avance de los mismos? Por supuesto, nos muestra el completo desinterés que tiene para nuestro dirigente del Estado de Puebla Mario Marín Torres ya no digamos las culturas, la Cultura de las Bellas Artes que le importa menos que la ineficiente gestión de su empleado a cargo de su dependencia de auténtica simulación. Por último, nos preguntamos, señor ciudadano gobernador ¿acaso el conocido despotismo del Secretario de Cultura así como su injerencia en la remoción del cargo del promotor cultural Gerardo Pérez Muñoz, es debido a que con escasos 24 mil pesos mensuales alcanzaba metas de promoción y difusión democrática que su lustroso secretario no puede con cerca de 83 millones de pesos mensuales? ¿o acaso le resultó incomodo a su administración que el pasado 21 de Febrero Día Internacional de las Lenguas Maternas el entonces responsable de la Dirección de Culturas Populares e Indígenas de Puebla celebrara la ocasión mediante un foro por el reconociemiento y la defensa de los valores culturales y lingüísticos de los pueblos originarios en nuestro estado? ¿o por qué se atrevió a mostrar ante la sociedad poblana que en nuestra entidad han desaparecido en los últimos tres lustros seis lenguas indígenas debido a la marginación gubernamental y al prejuicio social?
Foto: Nuestras Culturas, Gabriel Salazar

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